INIA Capella

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INIA Capella (LEAV 1609) es un cultivar de avena forrajera producto de un cruzamiento local, realizado en 2010, que combina los pooles genéticos de avena bizantina (representados por Estanzuela 1095a y RLE115 – Avena sativa var byzantina) y germoplasma de avena blanca o sativa (INIA Polaris e INIA Tucana, Avena sativa var sativa).

Ha sido seleccionada por su buena adaptación a siembras tempranas (primera quincena de febrero en La Estanzuela), una fenología muy adecuada al pastoreo, con floración en promedio 20 días posterior que Estanzuela 1095a, resistencia parcial a roya de la hoja y producción de grano.

Al igual que Estanzuela 1095a, tiene muy amplia adaptación a diferentes manejos de pastoreo durante el ciclo vegetativo. INIA Capella se adapta a las siembras de febrero con importantes aportes de forraje en el otoño e invierno. Su hábito vegetativo es semi-erecto, presenta un crecimiento inicial que puede ser lento, pero su oferta de forraje acumulada para otoño e invierno es importante, tanto para siembras de febrero como de marzo.

En la etapa reproductiva las plantas son muy foliosas, de tallos finos y gran macollaje. En el promedio de años evaluados el rendimiento en grano es similar al de Estanzuela 1095a y RLE 115 para fechas de siembra de mediados de junio. Su grano es un 20 a 25% más liviano que el de Estanzuela 1095a.

Se destaca por su aptitud para el pastoreo, permaneciendo productiva por un período más largo que Estanzuela 1095a, llegando a tener en condiciones favorables una destacada productividad en Primavera. A pesar de su ciclo largo, puede llegar a buenos rendimientos de heno.

INIA Capella presenta una producción estacional de forraje en Otoño e Invierno que llega a ser entre un 5 y un 15% superior a Estanzuela 1095a, diferencia que se amplifica en años y ambientes de alto potencial de producción de material seca (Figura 1), caracterizada además por su estabilidad.

INIA Capella presenta valores bajos a medios frente a enfermedades como manchas foliares y virus BYDV. Presenta muy buen comportamiento frente a roya del tallo y para roya de la hoja se han visto niveles de infección moderados a bajos con reacción moderadamente resistentes a resistentes (Federico Condón, Programa de mejoramiento de Avena y Resultado de evaluación de forrajeras. Castro et al (2018, 2019 y 2022). En situaciones de cosecha de grano o semilla, es posible que sea necesaria la aplicación de fungicida para el control de roya de hoja.

Implantación y manejo

Se adapta a variadas texturas de suelo, manifestando todo su potencial productivo en suelos de buena fertilidad, no tolerando anegamientos prolongados.

Las densidades de siembra recomendadas de INIA Capella son menores a las de Estanzuela 1095a, debido a su menor tamaño de semilla. Densidad de siembra recomendada: 300 semillas viables/m² (75 a 90 kg/ha)

Indicada para siembras de febrero-marzo. Cultivar que tolera pastoreos con acumulación de forraje. Si bien el primer pastoreo se debería hacer entorno a los 20-25 cm de altura, para asegurar tanto calidad como producción, no se han registrado problemas de inducción floral temprana debido a acumulación de forraje.

Siembras del 15 de febrero darían el primer pastoreo en los primeros diez días de abril, mientras que las siembras de marzo normalmente han dado su primer pastoreo a fines de abril o la primera semana de mayo.

Uso recomendado

La oferta de forraje otoño-invernal en siembras tempranas, y su ciclo largo, hacen de este cultivar una excelente opción de pastoreo directo. Se recomienda el pastoreo a 2 o 3 hojas elongadas para lograr un buen equilibrio entre calidad de forraje y productividad.

Su ciclo largo permite utilizarlo como antecesor de verdeos de verano, maíces de 2° o en chacras que vayan a siembras de praderas perennes donde no se quiera tener presencia de raigrás anual.

Status varietal

Cultivar protegido.

Licenciatario: Unión Rural de Flores, Agrofuturo, Serkan, Gentos, CALSAL y Fadisol